Jane Hart se hizo modelo de charlas adultas para exprimir sus sensaciones y emociones
Las primeras experiencias sexuales en el chat porno fueron para Jane Hart la demostración palpable de que estos sistemas de amistad, amor y sexo explotan realmente las sensaciones más básicas de cualquier ser humano. No solo de los visitantes al chat sino que también, (ese fue siempre su objetivo) las suyas propias. Jane experimentó la cálida y burbujeante sensación de la alegría y, a veces, también la tristeza. Descubrió el amor y esa necesidad de cuidar e incluso proteger a algunos de sus contactos más allegados del chat. Pero lo que la hizo sentirse descontrolada fue el sentimiento de excitación que la embriagó más que ningún otro.
Jane Hart sentía en cada sesión de charlas adultas esa necesidad primaria de sexo que la impulsaba a buscar satisfacción inmediata, un día tras otro, sin importar las consecuencias. De hecho esta rubia descontrolada aún no ha encontrado su techo, espera descubrirlo algún día, sentir ese orgasmo místico que la haga perder el control. Que quede en su recuerdo para siempre. Que lleve su mente al borde del colapso en un mundo de caos y perversión, disfrutando de cada segundo como si durase una eternidad.
Jane Hart sigue teniendo sexo en el chat y continúa buscando ese momento místico aún por descubrir. Cada día se conecta con la emoción de saber que esa experiencia está a la vuelta de esquina. Ya tiene para contar mil historias de situaciones en las que acabó descontrolada y vencida por un orgasmo colosal. Pero el rey de todos los orgasmos, el definitivo, aún está por llegar. Si la ves conectada entra a su sala, charla con simpatía y buen rollo. Llega a su corazón. Ella es la reina de las sensaciones, las que exprime hasta perder el control y hacértelo perder también a ti.
